El Volcán de Fuego de Guatemala sigue reportando hasta nueve explosiones por hora tras su violenta erupción del pasado domingo, que deja al menos 110 muertos, informó el Instituto Nacional de Sismología.
El volcán, de 3,763 metros de altura y ubicado 50 kilómetros al oeste de la capital guatemalteca, genera entre siete y nueve explosiones cada 60 minutos, detalla un comunicado del Instituto de Vulcanología, Meteorología e Hidrología.
Agregó que esas explosiones también generan gruesas columnas de humo que alcanzan los 4.800 metros sobre el nivel del mar y se dispersan con dirección al oeste y suroeste, a una distancia de 5 kilómetros.
Las explosiones verticales en el cráter principal provocarán la caída de ceniza en las comunidades de San Pedro Yepocapa, Santa Sofía, El Porvenir y Sangre de Cristo, advirtió el organismo
Agrega que por la inestabilidad que existe en el cono volcánico no se descartan nuevos flujos piroclásticos en todas las barrancas, principalmente en el flanco noreste, donde se produjo la erupción del pasado domingo.
La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) mantiene la alerta roja en los departamentos de Escuintla, Chimaltenango y Sacatepéquez, que fueron los más afectados por la virulenta erupción
Miles de guatemaltecos pidieron el sábado la renuncia del presidente de Guatemala, Jimmy Morales, por la “ineptitud” e “incapacidad” de su Gobierno para hacer frente a la emergencia y atender a los afectados.
Con antorchas encendidas y encabezados por estudiantes universitarios, los guatemaltecos exigieron “justicia” no solo para las víctimas sino para los afectados, a quienes no les está llegando la asistencia humanitaria.
Por el momento las labores de rescate están suspendidas por el mal clima y el riesgo que representan los lahares, miembros del Ejército se internaron el sábado en la zona del desastres, no para buscar sobrevivientes sino de cadáveres.