Zacatecas.- Como Nochistlán de Mejía no hay otro Pueblo Mágico, pues tiene una gran importancia histórica y belleza natural que deja cautivados a todos los que lo visitan. Esta población de Zacatecas también es conocida como el Lugar de las Tunas o el Lugar de Grana, un ejemplo de fuerza y valor.
Este Pueblo Mágico de Zacatecas está rodeado de cerros en donde abundan nopales repletos de tunas y grana, hogar de las tribus chichimecas. Además, es el más musical de todo el país, ya que todos adoran la música al ritmo de mariachi, la banda de tambora, son y jarabe, sin importar la hora del día.
En tu visita a este pueblo, no debes dejar pasar la oportunidad de disfrutar de las fiestas musicales del Jardín de Morelos. Otro atractivo para los viajeros es su arquitectura colonial, siendo el centro histórico el mayor atractivo, pues era un mercado de sedas, zapatos, especias, joyas y otros productos provenientes de Asia y Europa hace varios siglos.
La Palestina es también una buena parada turística, es una antigua tienda de abarrotes que continúa funcionando, así como su Mercado Municipal, donde encontrarás frutas cristalizadas, nieves de garrafa y diferentes artesanías. En Nochistlán de Mejía se destacan los trabajos de talabartería como sombreros y cinturones.
Nochistlán de Mejía, en Zacatecas, tiene también la Parroquia de San Francisco de Asís, el santo patrono del pueblo, donde podrás disfrutar de una arquitectura muy hermosa que te hace recordar el pasado y la religión entre los antepasados.
Si buscas deleitarte con su gastronomía, puedes probar su popular picadillo de carne deshebrada o el pollo valentina, acompañado de un buen trago de Tejuino y un postre como las gorditas de polvo. Además, no dejes pasar la oportunidad de probar platillos en sus más de 100 taquerías.
Otros de los atractivos que puedes conocer al visitar este Pueblo Mágico de Zacatecas es la Casa de los Ruiz, el Monumento a Tenamaztle, la Rotonda de Personajes Preclaros, el Salto de Toyahua, el Santuario de la Virgen del Rosario, el Teatro Minero Roque y el Templo de San José, sólo por mencionar algunos.
