Ante el aumento de los problemas sociales impulsan refugio en la fe religios
Zacatecas, Zac.- Han aumentado los problemas sociales que afectan a los zacatecanos debido a la crisis económica, de seguridad y de salud pública debido a la pandemia por lo que surgen manifestaciones religiosas en diversos sitios que son alentadas y muchas veces financiadas por el gobierno con recursos del erario.
Así lo reconoció Gabriela García, representante social en la entidad, quien aseveró que cuando el ser humano se enfrenta a situaciones difíciles sufre el sentimiento de desprotección, insatisfacción y desorientación, lo que le provoca que se refugie en elementos religiosos buscando consuelo a sus males, esperanza, protección y ayuda.
Así mismo señaló que tomando en cuenta los ingresos económicos con lo que se satisfacen las necesidades materiales- espirituales está claro que los pobres carecen de los medios suficientes para asegurar el alimento diario, el vestido, la salud, etc., provocando que millares de familias estén sumidas en complicada condición.
En Zacatecas es notorio que se extiende la competencia por tener al santo más grande, así es como se construyó por ejemplo el Niño de Zóquite en Guadalupe, el cristo monumental en los municipios de Tabasco y Apozol; también pasó con el Santo Niño de Atocha en la comunidad de Plateros, justificando su instalación en “la tierra de la fe y los milagros” esperando que en poco tiempo se genere bienestar para el pueblo.
“Esto es algo que observamos en Zacatecas donde autoridades de distintos niveles de gobierno se han convertido en los principales promotores de la instalación de santuarios con monumentos gigantescos para sacudirse de su responsabilidad de procurar acciones que se deriven en el bienestar material del pueblo que se traduzca luego en paz y tranquilidad que necesitan las familias”.
García López aseveró que este entorno se complica con las políticas de supresión de las partidas presupuestales por parte del gobierno federal pues no se atienden carencias de obras elementales como para llevar agua entubada para consumo de la gente o para la eliminación de desechos humanos a través del drenaje sanitario; porque no se puede vivir solo de fe, sino que urgen acciones materiales concretas que propicien el desarrollo común disminuyendo los conflictos sociales y dejando que la población decida libremente el pertenecer a cualquier credo religioso, no por temor o agradecimiento a dios, sino con plena libertad teniendo satisfechas las necesidades.